De esta propuesta me quedo con el resultado de situar en un mismo espacio elementos, en principio tan discordantes como un sofá victoriano, una rocking , una estantería modular y una mesa de los 70.
Una opción diferente para afrontar el "habitar" en espacios reducidos.
Frente a los sistemas compactos y modulares que imperan hoy, el aprovechamiento de mobiliario y el gusto por el estilo vintage se postulan en este ejemplo como una vía independiente, para gustos singulares y auténticos.